Yuan Zhang, Feng Lan, Luo Zhang
Allergy. 2021 Aug 11. doi: 10.1111/all.15044. Versión digital previa a la impresión.
La incidencia de la rinitis alérgica ha aumentado en los últimos años y representa una importante carga médica y económica en todo el mundo. En esta revisión se describen los principales hallazgos de los dos últimos años en relación con la rinitis alérgica, incluyendo los factores de riesgo que pueden aumentar su prevalencia, la estrategia de diagnóstico, los mecanismos inmunológicos subyacentes y las terapias utilizadas durante la pandemia de COVID-19. También pretende describir las perspectivas de futuro.
Algunos de los factores de riesgo de rinitis alérgica más importantes son la exposición ambiental, los cambios climáticos y el estilo de vida. Resulta esencial comprender la relación entre exposición ambiental y salud para poder diseñar perfiles de riesgo en lugar de utilizar factores predictivos individuales, lo que ayudaría a reducir los efectos negativos de estas patologías sobre los resultados sanitarios.
Un fenotipo de rinitis alérgica recientemente definido —la rinitis alérgica dual— incluye síntomas nasales relacionados tanto con la rinitis perenne como con la estacional, aunque está más relacionado con alérgenos estacionales. Esto indica que es fundamental evaluar la inflamación a nivel local.
Los autores sugieren combinar un diagnóstico preciso a nivel local y territorial junto con los métodos diagnósticos tradicionales para mejorar el enfoque basado en la medicina de precisión respecto al manejo de la rinitis alérgica.
En conclusión, es necesario comprender mejor los cambios que se producen en los perfiles celulares después del tratamiento. Aparte de los tratamientos habituales para la rinitis alérgica, durante la pandemia actual han sido de gran ayuda para el manejo de los pacientes con rinitis alérgica el distanciamiento social, el lavado de manos y la desinfección.