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El papel de las tecnologías móviles de salud para estratificar a los pacientes candidatos a recibir o interrumpir la inmunoterapia con alérgenos. La perspectiva ARIA-EAACI

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Jean Bousquet, et al.

J Allergy Clin Immunol Pract . 2021 Mar 1;S2213-2198(21)00240-3. doi: 10.1016/j.jaip.2021.02.035. Versión digital previa a la impresión.

Una de las opciones de tratamiento de la rinitis alérgica es la inmunoterapia con alérgenos (ITA). Existen diferentes guías y parámetros o estrategias de manejo nacionales para la ITA. Sin embargo, la decisión sobre su prescripción debe personalizarse en función de la importancia de los alérgenos y de la persistencia de los síntomas pese a utilizar medicamentos apropiados.

La práctica de la medicina se ha visto revolucionada por la transformación digital, con herramientas como la mHealth (salud móvil) y la inteligencia artificial que han colocado al paciente en el centro del sistema sanitario. Existen varios biomarcadores asociados a la mHealth y a los sistemas de ayuda a la toma de decisiones clínicas. Sin embargo, hay dos aspectos que deben tenerse en cuenta antes de utilizar cualquier herramienta de mHealth: el respeto de las normativas de privacidad y la validación. Entre el pequeño número de herramientas disponibles para la rinitis alérgica, se identificaron cuatro apps cuyo desarrollo está basado en la evidencia: MASK-air, AllergyMonitor, Polle y Air Rater.

Esta revisión se centra en la estratificación de los pacientes para recibir una ITA, las puntuaciones de la medicación y los síntomas para el seguimiento, los ensayos clínicos y la Academia Europea de Alergia e Inmunología Clínica (EAACI).

La estratificación de los pacientes es necesaria para:

–    Identificar a los mejores candidatos para la intervención a través de una compleja gestión asistencial

–    Reducir el tiempo y los recursos necesarios para asociar a un paciente a un determinado programa de manejo asistencial

–    Optimizar los costes.

Se necesitan puntuaciones de medicación y síntomas para evaluar la eficacia de la ITA, especialmente a través de ensayos clínicos y estudios observacionales.

La EAACi ha creado un grupo de trabajo para evaluar las innovaciones y el futuro potencial de la tecnología en el campo de la rinitis alérgica. Este grupo ha evaluado los productos de mHealth en relación con su diseño, compromiso de los usuarios, contenido, potencial para inducir cambios conductuales, credibilidad y políticas de privacidad.

En conclusión, la tecnología mHealth podría ayudar a tomar decisiones sobre la ITA, mejorar el cumplimiento terapéutico, supervisar la eficacia y la seguridad, e identificar a las personas que responden al tratamiento. Sin embargo, estas herramientas también pueden tener inconvenientes, por ejemplo, si no están validadas o no se utilizan adecuadamente.

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Asociación entre los niveles séricos de vitamina D e inmunoglobina E y la gravedad de la rinitis alérgica

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Nukhbat U. Awan, Shahzada K. Sohail, Fatima Naumeri, Shahida Niazi, Khalid Cheema, Samina Qamar, Syeda Fatima Rizvi

Cureus. 2021 Jan 25;13(1): e12911. doi: 10.7759/cureus. 12911..

Uno de los síntomas de la rinitis alérgica es la inflamación de la mucosa nasal. Esta patología afecta hasta al 30-40 % de la población, con una prevalencia creciente. El objetivo de este estudio era evaluar la relación entre la gravedad de la rinitis alérgica y los niveles séricos de vitamina D e inmunoglobina E (IgE).

Se trataba de un estudio de casos y controles realizado entre junio y septiembre de 2020 con un total de 224 participantes divididos en dos grupos. El grupo A incluyó a 112 participantes con síntomas de asma de moderados a graves y el grupo B (control) incluyó a 112 participantes con síntomas de asma leves tras el tratamiento de la rinitis alérgica. Se compararon los dos grupos evaluando la diferencia media entre los niveles séricos de IgE y vitamina D. La relación se evaluó mediante regresión logística y odds ratio.

Participaron 106 mujeres (47,3 %), con una edad media de 26,78 ± 8,92 años en el grupo A y de 25,72 ± 8,12 años en el grupo B. La media de los niveles séricos de IgE fue de 383,69 ± 154,86 UI/mL en el grupo A y de 373,03 ± 106,83 UI/mL en el grupo B (p = 0,0001). La media de los niveles séricos de vitamina D fue de 16,24 ± 6,7 ng/mL en el grupo A y de 26,92 ± 35 ng/mL en el grupo B (p = 0,0001).

Los participantes con niveles bajos de vitamina D mostraron una probabilidad 24 veces mayor de desarrollar rinitis alérgica de moderada a grave. En conclusión, este estudio demostró que los niveles de IgE están aumentados en la rinitis alérgica de moderada a grave, en comparación con la rinitis alérgica leve. La deficiencia de vitamina D está relacionada con una mayor gravedad de los síntomas de rinitis alérgica.

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Consenso de expertos sobre los aspectos prácticos del tratamiento de la urticaria crónica

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Andrea Bauer, et al.

Allergo J Int. 2021 Feb 24;1-12. doi: 10.1007/s40629-021-00162-w. Versión digital previa a la impresión.

La urticaria crónica es una enfermedad frecuente que supone una gran carga para muchos pacientes, ya que a menudo no se logra un adecuado control de los síntomas. Las guías actuales incluyen el diagnóstico y tratamiento de la urticaria basados en la evidencia. Sin embargo, no abordan determinadas cuestiones de la práctica clínica diaria. El objetivo de este estudio era resumir los resultados de una reunión virtual, celebrada en mayo de 2020, en la que los especialistas hablaron sobre los aspectos prácticos de la urticaria crónica con el fin de formular recomendaciones que ayuden al tratamiento en la práctica clínica diaria.

Se sabe que el diagnóstico de la urticaria crónica se establece rápidamente mediante exploración física, anamnesis y pruebas analíticas, y lo mismo debería suceder con su tratamiento, tanto si hay habones como angioedema, o ambos. La primera opción de tratamiento es un antihistamínico H1 no sedante de segunda generación. Si la urticaria no desaparece en el plazo de dos a cuatro semanas, se recomienda aumentar la dosis. Si no hay mejoría al cabo de dos a cuatro semanas, debería administrarse un tratamiento complementario con anticuerpos IgE autorizados, como omalizumab.

Si no hay éxito terapéutico después de seis meses con omalizumab, se recomienda probar ciclosporina A fuera de la indicación autorizada, además de continuar con los antihistamínicos H1. En caso de exacerbaciones agudas se pueden administrar glucocorticoides orales/sistémicos durante un periodo máximo de 10 días para reducir la duración y la actividad.

En conclusión, estas recomendaciones se suman a las guías de tratamiento existentes como apoyo a la práctica clínica en personas con urticaria crónica. El objetivo es ayudar a estas personas a vivir sin síntomas y con mejor calidad de vida, y garantizar que el médico responsable del tratamiento informe y aconseje adecuadamente al paciente en relación con el uso de fármacos fuera de su indicación autorizada.

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Respuestas neurofisiológicas exageradas a factores estresantes en pacientes con urticaria crónica espontánea

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Engel-Yeger B, Maurer M, Hawro T, Zubedat S, Avital A, Kessel A

Clin Exp Allergy. 2021 Feb 22. doi: 10.1111/cea.13854. Versión digital previa a la impresión.

La urticaria crónica espontánea afecta a la calidad de vida y el bienestar emocional de las personas que la padecen. Estos pacientes presentan mayor angustia emocional, ansiedad, depresión, trastornos somatomorfos y estrés, en correlación con la actividad de la urticaria.

Las personas con urticaria crónica espontánea podrían ser más sensibles a los factores estresantes y, por lo tanto, presentar mayores respuestas de estrés. Las respuestas de estrés pueden dar lugar a la secreción de neuropéptidos desde los nervios cutáneos sensitivos, interactuando con los mastocitos y liberando histamina, lo que provocaría los ataques de urticaria crónica espontánea.

Este estudio comparó las respuestas de estrés a un estímulo acústico de sobresalto y los niveles de estrés en 47 personas con urticaria crónica espontánea y 56 voluntarios sanos. Los niveles de estrés se evaluaron mediante la Escala de estrés percibido (PSS).

La sesión de exposición al factor estresante tuvo una duración de tres minutos. Los participantes fueron expuestos a 40 estímulos auditivos de sobresalto espaciados de forma aleatoria. Las respuestas a los estímulos se evaluaron mediante electromiografía, midiendo la amplitud de contracción del músculo orbicular del párpado y el número de parpadeos oculares para cada estímulo de sobresalto.

 

Las respuestas a los estímulos acústicos de sobresalto fueron más fuertes en las personas con urticaria crónica espontánea que en los voluntarios sanos, con valores medios elevados en la electromiografía y un mayor número de parpadeos oculares. Las personas con urticaria también presentaban respuestas de estrés y niveles de estrés más prolongados, según los resultados de la Escala de estrés percibido.

En conclusión, las personas con urticaria presentan mayores respuestas de estrés según las valoraciones objetivas y subjetivas. Deberían estudiarse mejor los mecanismos neuroinmunitarios subyacentes, ya que es posible que el estrés predisponga a la urticaria crónica espontánea y que a su vez la urticaria crónica espontánea aumente el estrés, creando un bucle de amplificación de la enfermedad.

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Antihistamínicos y fármacos catiónicos anfifílicos: ¿podrían convertirse estas viejas moléculas en nuevas herramientas contra la COVID-19?

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Clara Gitahy Falcao Faria, et al.

Med Hypotheses. 2021 Jan 24;148:110508. doi: 10.1016/j.mehy.2021.110508. Versión digital previa a la impresión.

Algunos estudios demuestran que los fármacos psicoactivos podrían proteger contra la infección por SARS-CoV-2. Los antihistamínicos H1 y los fármacos catiónicos anfifílicos (FCA) se han identificado como sustancias potencialmente efectivas contra el coronavirus. Los FCA producen alteraciones en la circulación intracelular, lo que podría interferir en la entrada del virus y su replicación.

Muchos antihistamínicos también son FCA, así que actúan a nivel de la entrada del virus y regulan de forma negativa la liberación por los macrófagos pulmonares humanos de IL-6, una interleucina que se secreta en grandes cantidades durante la tormenta de citocinas de la COVID-19.

Los antihistamínicos H1 en general, y las fenotiazinas y sus derivados en particular, pueden representar una estrategia útil contra el SARS-CoV-2 en diferentes estadios, desde la profilaxis hasta la prevención de las complicaciones. Además, en una muestra de 219 000 registros sanitarios se demostró que tres antihistamínicos (azelastina, difenhidramina e hidroxicina) se asociaban a una menor incidencia de SARS-CoV-2 en personas mayores de 61 años.

Aunque estudios más recientes sugieren que los trastornos psiquiátricos pueden aumentar el riesgo de presentar o desarrollar una forma grave de COVID-19, los autores plantean la hipótesis de que los pacientes con enfermedad mental, una vez hospitalizados por COVID-19, presentan un mayor riesgo debido a la posible reducción o interrupción de medicamentos que tienen un efecto potencial contra el SARS-CoV-2.

En conclusión, los fármacos mejor tolerados (con pocos efectos adversos) pueden convertirse en candidatos a tratamientos profilácticos para reducir el riesgo de infección por SARS-CoV-2 en la población general. En cualquier caso, siempre debe evaluarse la relación beneficio-riesgo.

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Factores predictivos de la respuesta al tratamiento en la urticaria crónica espontánea

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Jie Shen Fok, Pavel Kolkhir, Martin K. Church, Marcus Ma

Allergy. 2021 Feb 4. doi: 10.1111/all.14757. Versión digital previa a la impresión.

La urticaria crónica espontánea se caracteriza por la presencia de habones y/o angioedema durante más de seis semanas. La urticaria crónica altera la calidad de vida de los pacientes, afectándola a nivel de relaciones personales, trabajo y sueño. Las guías de tratamiento existentes recomiendan escalar el tratamiento, pasando de los antihistamínicos H1 de segunda generación a omalizumab y ciclosporina, hasta alcanzar la respuesta completa.

El objetivo de esta revisión es evaluar los factores predictivos de respuesta y falta de respuesta a estos tratamientos en la urticaria crónica espontánea.

Se realizó una búsqueda sistemática en la base de datos PubMed/MEDLINE y se incluyeron 73 estudios. Los niveles de evidencia se clasificaron como «fuertes» (factores predictivos robustos), «débiles» (factores predictivos emergentes) o «no relacionados».

Una elevada actividad de la enfermedad, un nivel alto de la proteína C reactiva y el dímero-D son factores predictivos fuertes de una respuesta escasa o nula a los antihistamínicos H1. Un nivel sérico bajo de IgE total puede predecir la respuesta a omalizumab. La respuesta a ciclosporina se puede predecir mediante una prueba positiva de liberación de histamina por los basófilos, mientras que una IgE total baja es un factor predictivo emergente.

En conclusión, existen factores predictivos clínicos y bioquímicos de falta de respuesta a los antihistamínicos H1 y a omalizumab, así como factores predictivos de respuesta a ciclosporina. Estos factores predictivos pueden ayudar a los especialistas a aconsejar a sus pacientes, así como a evaluar y cambiar a un tratamiento más efectivo a aquellos que presentan riesgo de no responder.

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Reposicionamiento de un antagonista del receptor de la histamina H1: doxepina inhibe la viropexia del pseudovirus con espícula SARS-CoV-2 mediante el bloqueo de la ACE2

By Artículos seleccionados

Shuai Ge, Xiangjun Wang, Yajing Hou, Yuexin Lv, Cheng Wang, Huaizhen He

Eur J Pharmacol. 2021 Jan 23;896:173897. doi: 10.1016/j.ejphar.2021.173897. Versión digital previa a la impresión.

Desde que se detectó a finales de 2019, la propagación del coronavirus SARS-CoV-2 está amenazando nuestra salud en todo el mundo. Existe una necesidad urgente de fármacos y vacunas efectivos para luchar contra la COVID-19, pero es posible que esto lleve más tiempo del previsto. Una de las estrategias que podrían ayudar a combatir esta situación es utilizar fármacos ya existentes para reducir el tiempo de desarrollo y luchar contra la irrupción de este virus.

Se ha observado que los antagonistas de los receptores de la histamina H1 (antihistamínicos H1) tienen efectos antivirales de amplio espectro.

El objetivo de este estudio era seleccionar, entre los fármacos dirigidos a los receptores de la histamina H1, aquellos que tengan capacidad para inhibir la infección por el virus SARS-CoV-2.

Se observó que cinco antihistamínicos H1 autorizados por la FDA presentaban bioafinidad por la enzima convertidora de angiotensina 2 (ACE2), de acuerdo con un modelo de cromatografía de membranas celulares HEK293T con sobreexpresión de ACE2.

A continuación se determinó la interacción entre estos fármacos y la ACE2 mediante análisis frontal y resonancia del plasmón de superficie (SPR), demostrándose sistemáticamente su unión a la ACE2 a nivel de afinidad micromolar. Un análisis con pseudovirus ha permitido observar que doxepina podría inhibir la entrada del pseudovirus con espícula SARS-CoV-2 en la célula que expresa ACE2, reduciendo la tasa de infección al 25,8 %.

Doxepina podría ser un candidato para los ensayos clínicos dirigidos a luchar contra la COVID-19. Sería recomendable comparar estos datos con los resultados in vivo y proporcionar evidencias para su evaluación final en ensayos clínicos.

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Allergic rhinitis: impact on quality of life of adolescents

Rinitis alérgica: repercusión en la calidad de vida de los adolescentes

By Artículos seleccionados

C S Rosario

Eur Ann Allergy Clin Immunol. 2020 Nov 12. doi: 10.23822/EurAnnACI.1764-1489.176. Publicación electrónica antes de la impresión.

Una de las etapas más rápidas del desarrollo humano es la adolescencia, cuando la madurez biológica se adelanta a la madurez psicológica. El 15 % de los jóvenes entre 13 y 14 años padecen rinitis alérgica, el doble que con 6 o 7 años. La prevalencia de rinitis alérgica es más alta entre los niños mayores de 10 años. Se invierte en las niñas, en las que la prevalencia es mayor en la adolescencia, mientras que en la edad adulta no se observan diferencias de prevalencia entre ambos sexos.

Los cambios en la adolescencia tienen consecuencias en la salud a lo largo de la vida y repercuten en la calidad de vida. La repercusión de la rinitis alérgica en la calidad de vida de los adolescentes y sus padres es considerable: la mayoría de los antihistamínicos tienen efectos sedantes, los adolescentes faltan a la escuela y el rendimiento es menor debido a las distracciones, al cansancio o a la irritabilidad.

La repercusión también es negativa para los padres, que se sienten ansiosos, sobreprotectores y tienen que faltar al trabajo. La tecnología digital es la manera de facilitar un método inicial para caracterizar los signos y síntomas de la rinitis alérgica, así como su conexión con otras enfermedades alérgicas. El éxito del tratamiento radica en la relación de los adolescentes con rinitis alérgica y la tecnología móvil, ya que les permite disponer de más información sobre la enfermedad y su tratamiento.

En conclusión, existe cierto conocimiento sobre las dificultades a las que se enfrentan los adolescentes con asma, pero falta información sobre las dificultades en casos de rinitis alérgica.

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COVID-19 and allergy: How to take care of allergic patients during a pandemic?

Covid-19 y alergia: ¿cómo cuidar a los pacientes alérgicos durante una pandemia?

By Artículos seleccionados

Antonella Cianferoni, Martina Votto

Pediatr Allergy Immunol. 2020 Nov;31 Suppl 26:96-101. doi: 10.1111/pai.13367.

La enfermedad causada por el coronavirus del síndrome respiratorio agudo grave de tipo 2 (SARS-CoV-2), conocida también como covid-19, constituye una nueva amenaza para todos debido a su alta tasa de infección y morbimortalidad en poblaciones vulnerables. Las personas con rinitis alérgica necesitan continuidad en la atención por parte de los alergólogos durante la pandemia. Los alergólogos se enfrentan a la dificultad de protegerse de la infección y, al mismo tiempo, ofrecer asistencia a las personas con rinitis alérgica. Deben estar preparados para trabajar de manera segura, con bastantes cambios en el ejercicio de su profesión, hasta que exista una vacuna universal o se alcance la inmunidad de grupo. Algunas enfermedades que atienden los alergólogos no se consideran factores de riesgo, pero los síntomas, como la tos o los estornudos, son diagnósticos diferenciales con la covid-19.

A continuación, se muestra un resumen de cómo tratar las alteraciones específicas en la consulta de alergia:

  • Se pueden retrasar las pruebas cutáneas, ya que en muchos casos la información no es imprescindible para el tratamiento inmediato del paciente.
  • Se deben retrasar las provocaciones con alimentos, excepto aquellas con cacahuetes en lactantes o para introducir un alimento fundamental indicado para una nutrición que evite intervenciones como la colocación de sondas de gastrostomía o sondas nasogástricas.
  • En los pacientes que reciben inmunoterapia, se puede espaciar la administración hasta 6 semanas para disminuir las consultas durante la pandemia, con la posibilidad de ajustar la dosis hasta que se reanude el calendario habitual. Sin embargo, se debe evitar el inicio de la inmunoterapia.
  • Es posible que la espirometría produzca aerosolización. Por eso, no se debe realizar la prueba a las personas con covid-19 o síntomas gripales. Durante la fase pandémica, se deben aplazar todas las pruebas habituales.
  • El asma es un factor de riesgo de enfermedad grave en el caso de infección por coronavirus 2. Sin embargo, las recomendaciones actuales son seguir con las directrices de tratamiento.
  • Los pacientes con rinitis alérgica deben continuar el tratamiento. No hay pruebas de que estos pacientes tengan riesgo de complicaciones graves en caso de covid-19. Se puede valorar la rinitis alérgica mediante telemedicina o por teléfono y se debe aplazar el estudio de la alergia.

Cualquier sugerencia puede cambiar rápidamente debido a la evolución de la situación de cada territorio. Limitar las consultas presenciales puede tener consecuencias económicas importantes. Además, se debe tener en cuenta que habrá algún momento en el que la demora de la intervención represente un riesgo más real para el paciente que el riesgo potencial de estar expuesto a la covid-19.

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The usage, quality and relevance of information and communications technologies in patients with chronic urticaria:

El uso, la calidad y la pertinencia de las tecnologías de la información y comunicación en los pacientes con urticaria crónica: un estudio en una UCARE

By Artículos seleccionados

Marcus Maurera, et al.

World Allergy Organ J. 2020 Oct 30;13(11):100475. doi:10.1016/j.waojou.2020.100475. eCollection 2020 Nov.

La urticaria crónica se caracteriza por ronchas pruriginosas, angioedema o ambos durante 6 o más semanas. Afecta a la calidad de vida física y emocional de los pacientes. Las personas con urticaria u otras enfermedades crónicas buscan información a partir de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). El objetivo de este estudio fue evaluar la frecuencia de uso y la preferencia por las TIC de pacientes con urticaria crónica.

Se trata de un estudio transversal en el que se incluyeron 1 800 pacientes con urticaria crónica, espontánea o inducible, mayores de 12 años, que se reclutaron en centros de atención primaria, hospitales universitarios o en centros especializados UCARE (por sus siglas en inglés, centros de referencia y excelencia de la urticaria) de 16 países. Los pacientes tuvieron que completar un cuestionario de 23 ítems con preguntas sobre el uso de las TIC, como el tipo, la frecuencia, la preferencia y la calidad. Las respuestas se registraron en una base de datos. Las TIC se clasificaron después en tres grupos: de uno a uno ( SMS, WhatsApp, Skype y correo electrónico); de uno a muchos (YouTube, navegadores de internet, blogs y foros), y de muchos a muchos (Instagram, Twitter, Facebook y LinkedIn).

A nivel mundial, la mayoría de los pacientes con urticaria crónica tuvieron acceso a las plataformas TIC (99,6 %) o a internet (96,7 %). Las plataformas TIC de uno a uno se usaron con mayor frecuencia (85,4 %), seguidas de las TIC de uno a muchos (75,5 %) y de las TIC de muchos a muchos (59,2 %). El uso de las plataformas TIC aumentó con el nivel educativo del paciente. Las preferidas para la información médica general y la urticaria crónica fueron las de uno a muchos. Para obtener información específica de la urticaria crónica, 3 de cada 4 pacientes usaron un navegador de internet; el 20,9 %, Youtube y el 13,6 %, Facebook. Uno de cada cinco pacientes no usó ningún tipo de TIC. La calidad de la información se consideró muy interesante y de calidad buena para la información médica general (53,5 %) y la relacionada con la urticaria crónica (51,5 %) en comparación con otras categorías.

En conclusión, el uso de las tecnologías de la información y la comunicación para obtener información médica o específica de la urticaria es muy alta en todos los países, siendo los navegadores de internet la plataforma preferida.

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Cold urticaria what we know and what we do not know

Lo que sabemos y lo que no sabemos de la urticaria por frío

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Natalya Maltseva, et al.

Allergy. 2020 Nov 28. doi: 10.1111/all.14674. Publicación electrónica antes de la impresión.

La urticaria por frío es un subtipo de urticaria crónica inducible, que se caracteriza por ronchas o angioedema que aparece después de la exposición al frío. Constituye un problema clínico complejo por el riesgo de anafilaxia inducida por frío, por su larga duración y por la dificultad de diagnóstico respecto a la urticaria por frío atípica. La urticaria por frío se clasifica en los subtipos típico y atípico. Gracias a los últimos estudios y directrices se ha avanzado en su conocimiento y tratamiento.

Se cree que conlleva la formación de autoalérgenos y de IgE frente a estos autoalérgenos producidos por el frío, lo cual provoca la liberación de mediadores desde los mastocitos dérmicos.

Se sabe que las ronchas causadas por el frío se desarrollan durante el recalentamiento y desaparecen en una hora, y que puede aparecer anafilaxia. El diagnóstico se basa en la anamnesis del paciente y en la prueba de estimulación por frío. Otras pruebas, que deben realizarse si el paciente tiene antecedentes de interés, consisten en buscar infecciones preexistentes. El tratamiento de la urticaria por frío consiste en evitar el frío, administrar antihistamínicos no sedantes y, en caso necesario, omalizumab.

Cuestiones sin resolver son, entre otras, la epidemiología de la urticaria por frío, los mecanismos patológicos subyacentes, la heterogeneidad clínica y las respuestas a los tratamientos.

Para mejorar el conocimiento general de la urticaria y la anafilaxia por frío, se está realizando un estudio multicéntrico internacional de observación y prospectivo, COLD-CE, siendo la fisiopatología la prioridad de la investigación. Se necesitan más estudios de sustancias innovadoras para el angioedema orofaríngeo y la anafilaxia por frío en la urticaria por frío. La aplicación de la genómica, la posgenómica y los métodos de aprendizaje automatizado son las siguientes fronteras de la investigación hacia dianas terapéuticas novedosas.

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nasal allergen challenge in allergic rhinitis

Provocación nasal reiterada con alérgenos en la rinitis alérgica: acondicionamiento e inflamación de tipo Th2 sin indicios de una reestructuración

By Artículos seleccionados

Nara Orban, Mikila R Jacobson, Kayhan T Nouri-Aria, Stephen R Durham, Aarif O Eifan

Clin Exp Allergy. 2020 Nov 3. doi: 10.1111/cea.13775. Publicación electrónica antes de la impresión.

La rinitis alérgica estacional se caracteriza por una eosinofilia tisular local y por las citocinas de tipo Th2. El asma se caracteriza por una reestructuración del árbol bronquial, que difiere de los datos de reestructuración en la rinitis alérgica. El objetivo de este estudio fue evaluar la relación entre la inflamación alérgica y las particularidades de la reestructuración en la rinitis alérgica mediante una novedosa prueba de provocación nasal reiterada con alérgenos en los seres humanos.

En este estudio se incluyeron doce pacientes con rinitis alérgica moderada o grave que se sometieron a provocaciones con un diluyente durante 5 días alternos, seguidas de provocaciones con extracto de polen de gramíneas durante 5 días alternos después de 4 semanas. Se evaluaron los síntomas nasales y las citocinas Th1 y Th2 en la secreción nasal y en la sangre. Se tomaron biopsias nasales un día después de la primera y la quinta provocación con diluyente y alérgeno. Se realizaron provocaciones con diluyente y alérgeno una sola vez a dieciséis controles sanos. Se evaluaron las células epiteliales, las inflamatorias de la submucosa y los marcadores de reestructuración mediante análisis de imágenes digitales.

Los síntomas de rinitis alérgica aumentaron después de cada provocación con alérgeno en comparación con el diluyente (p < 0,05), y se observaron indicios de un acondicionamiento clínico e inmunológico. La secreción nasal de eosinófilos tisulares y de IL-5 aumentó de manera considerable después de la provocación nasal con alérgenos en comparación con las respectivas provocaciones con diluyente. En los pacientes con rinitis alérgica se observó una correlación entre los mastocitos de la submucosa y la respuesta clínica inmediata, así como una asociación entre los eosinófilos epiteliales y la secreción nasal de IL-5. Después de la provocación con alérgenos, no hubo diferencias entre los casos de rinitis alérgica y los controles respecto a la integridad epitelial, el grosor de la lámina reticular de la membrana basal y la expresión de marcadores de activación de la reestructuración de las vías respiratorias, tales como α-SMA, HSP-47, matriz extracelular, angiogénesis y linfangiogénesis.

En conclusión, las novedosas provocaciones nasales reiteradas con alérgenos en personas con rinitis alérgica persistente grave produjeron eosinofilia tisular. Aumentaron la IL-5, pero no se produjeron modificaciones estructurales, lo cual apoya la ausencia de relación entre la inflamación Th2 y el desarrollo de la reestructuración de las vías respiratorias en la rinitis alérgica.

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Algoritmo terapéutico de EUFOREA para la rinitis alérgica

Algoritmo terapéutico de EUFOREA para la rinitis alérgica

By Artículos seleccionados

P W Hellings, et al.

Rhinology. 2020 Sep 29. doi: 10.4193/Rhin20.246. Publicación electrónica antes de la impresión.

La rinitis alérgica es la enfermedad inflamatoria crónica más frecuente. Afecta a más de cien millones de habitantes en Europa, y su repercusión en las personas, la sociedad y las economías sanitarias es considerable. La mayoría de las veces, los pacientes prefieren autocontrolar la enfermedad a través de la farmacia en lugar de buscar un asesoramiento médico debido a la larga espera para conseguir una cita.

Otras dificultades para un tratamiento adecuado y eficaz de la rinitis alérgica son la incapacidad para reconocerla, diagnosticarla y prescribir un tratamiento de manera satisfactoria. Recientemente, el tratamiento de la rinitis alérgica se ha acercado un poco más al criterio del paciente y da prioridad a las estrategias personalizadas, predictivas, preventivas y participativas.

EUFOREA (por sus siglas en inglés, The European Forum for Research and Education in Allergy and Airway Diseases) y los principales líderes de opinión mundiales han desarrollado un algoritmo para facilitar el tratamiento de la rinitis alérgica en situaciones de la vida real. Esta guía consiste en una lista de verificación de lo que hacer cuando se examina a los pacientes, especialmente una lista de síntomas indicativos de rinitis alérgica, preguntas sobre la sospecha de asma e instrucciones para el uso de escalas visuales. Consta de cinco pasos: diagnóstico, clasificación de los pacientes, definición del tratamiento, selección del medicamento y activación del plan de tratamiento. La educación de los pacientes es fundamental en todas las etapas, además de su participación en el proceso de toma de decisiones y en el establecimiento de los objetivos.

Este algoritmo es conciso, fácil de aplicar y adecuado para todos los interesados, a saber, farmacias, médicos de atención primaria, otorrinolaringólogos, neumólogos, alergólogos y pediatras. Proporciona recomendaciones para el control de la rinitis alérgica avaladas por especialistas y fundamentadas en datos científicos. La guía de bolsillo completa se encuentra disponible en la página web de EUFOREA (www.euforea.eu).

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urticaria y antihistaminicos H1

Farmacoterapia de actualidad y reciente aparición para la urticaria crónica espontánea: un asunto primordial en las opciones terapéuticas sin biofármacos

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Kam Lun Hon, Joyce T. S. Li, Alexander K. C. Leung, Vivian Lee

Expert Opin Pharmacother. 2020 Sep 29. doi: 10.1080/14656566.2020.1829593. Publicación electrónica antes de la impresión.

La urticaria se caracteriza por las ronchas pruriginosas de las capas superficiales de la piel, que se presentan sin causa evidente durante seis o más semanas. Es una enfermedad que disminuye la calidad de vida del paciente y que puede tener un coste socioeconómico importante. El objetivo de esta revisión fue analizar las guías clínicas para el tratamiento de la urticaria.

Según la iniciativa conjunta de la red de excelencia fundada por la UE, la Global Allergy and Asthma European Network, la European Academy of Allergology and Clinical Immunology, la Organización Mundial de la Salud y el European Dermatology Forum, el tratamiento de la urticaria se debe realizar de una manera escalonada. Los antihistamínicos H1 de segunda generación se consideran el tratamiento de primera línea. Cuando los síntomas no se suprimen de manera satisfactoria, el tratamiento debe seguir el algoritmo. Este consiste en aumentar la dosis de los antihistamínicos H1 de segunda generación, junto a los antihistamínicos H1 de primera generación, los antagonistas H2, el omalizumab, la ciclosporina A o, si fuera necesario, los corticosteroides a corto plazo. Los inhibidores de la tirosina-cinasa esplénica, de la tirosina-cinasa de Bruton, del receptor de la prostaglandina D2, los antihistamínicos H4 y los fármacos biológicos son nuevos tratamientos en desarrollo. Otros fármacos son los antagonistas del receptor de leucotrienos, los anticoagulantes y antifibrinolíticos, los antidepresivos, la vitamina D y otros antinflamatorios o inmunodepresores.

Según los autores, los antihistamínicos H1 de segunda generación se deben tener siempre en cuenta en el tratamiento de la urticaria como opción terapéutica de primera línea. Para los que no responden a las dosis más altas de antihistamínicos H1, en las guías se recomienda introducir el omalizumab. Se necesitan ensayos clínicos con un buen diseño para sacar conclusiones claras.

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asma alergia y covid

La expresión de ACE2 en la enfermedad alérgica de las vías respiratorias tal vez disminuya el riesgo y la gravedad de la COVID-19

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Sunita Chhapola Shukla

Eur Arch Otorhinolaryngol. 2020 Oct 6;1-4. doi: 10.1007/s00405-020-06408-7. Publicación electrónica antes de la impresión.

Al comienzo de la pandemia de COVID-19, la rinitis alérgica, la alergia, el asma y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica se consideraron factores de riesgo porque, por lo general, empeoran durante las infecciones respiratorias víricas y porque, en las etapas tempranas de la COVID-19, los síntomas de la infección vírica de las vías respiratorias altas se superponen con los de la rinitis alérgica y la gripe. El objetivo de esta revisión fue repasar los últimos estudios publicados en los que no se confirma que la alergia o el asma sean factores de riesgo ni que incrementen la gravedad de la COVID-19.

En las publicaciones recientes no se demuestra que las enfermedades alérgicas de las vías respiratorias sean un factor de riesgo alto o supongan un incremento de la gravedad de la COVID-19. La causa es que existe una reducción de la expresión del gen de la enzima convertidora de la angiotensina 2 (ACE2) en las células nasales o bronquiales de las enfermedades alérgicas de las vías respiratorias.

La expresión baja de ACE2 en las células de las vías respiratorias de las personas con rinitis o asma alérgicas disminuye el riesgo de contraer la COVID-19 y no siempre es un factor de riesgo de infección grave. Sin embargo, esto no se cumple para el fenotipo de asma no atópica. Se necesitan más estudios para conocer la repercusión de las enfermedades alérgicas respiratorias y la respuesta inflamatoria T2 en la gravedad y en el riesgo de contraer la COVID-19. Es fundamental seguir tratando la rinitis alérgica y el asma con corticosteroides inhalados, biofármacos o inmunoterapia con alérgeno durante la pandemia de COVID-19.

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